Ya sabemos que una tabla de cortar es un utensilio plano empleado en la cocina, para llevar a cabo operaciones de cortado y picado de alimentos. Suelen ser de madera o plástico y podemos decir que cumplen dos misiones. En primer lugar proporcionan una superficie plana, segura y homogénea para el cortado y picado. Además habitualmente las utilizamos para colocar encima de ellas las ollas, placas de horno y sartenes calientes que puedan dañar el mobiliario de cocina.
Es un elemento de cocina en el que predomina la utilidad antes que la estética. Es lógico. Pero rebuscando en este mundo global que es internet, puedes encontrar tablas de cortar distintas, curiosas, diferentes en el diseño pero igual de prácticas a la hora de utilizarlas. Os presentamos algunas de esas opciones diferentes.
En primer lugar, una tabla de cortar realizada en madera con reglas pintadas. Y no sólo reglas con medidas. Además tiene ángulos para orientarte cuando quieras hacer cortes de alimentos. Es sin duda una gran idea para esas personas que gustan de cocinar y cuidan hasta el último detalle de presentación de sus platos.
La segunda opción que os enseñamos, es una tabla de cortar también realizada en madera que tiene un agujero para ayudarnos a mover los alimentos recién cortados o picados. Buena opción cuando no tenemos utensilios de cocina aptos para recoger los alimentos de la tabla o para cuando queremos verter productos desde la tabla a recipientes pequeños.
Por último, otra tabla de cortar hecha en madera a partir de una tapa de un barril de vino. Te la puedes fabricar tú mismo, con bajo coste y con la conciencia tranquila, ya que con este acto de reciclaje, seguro que hacemos de este mundo un lugar más sostenible.