Laberinto de Madera
Empezamos quizás por el más habitual de los juegos de escritorio y es que a lo largo de la historia, los laberintos se han utilizado a menudo como una forma de meditación y concentración, ya que obligan a la mente a contemplar las cosas desde un punto de vista diferente. Es un cachivache divertido, donde tendrás que guiar cinco bolas de acero a través de una pista circular. El camino es difícil, pero seguro que encuentras una pequeña satisfacción una vez introducidas las cinco bolas en el centro del laberinto.
Canasta de Baloncesto
Este juego de escritorio con una canasta de baloncesto te puede hacer liberar mucha tensión. La altura del aro se puede ajustar a varios niveles para practicar el lanzamiento con dificultades diferentes y la bola se lanza mediante un resorte de modo que no será necesario entrenar muy duro para alcanzar grandes marcas. Seguro que se organizarán competiciones entre amigos y compañeros alrededor de este pequeño juego de escritorio. (Vídeo)
Campo de Golf
Si estás atrapado en un banco de arena, este campo de golf en miniatura te ayudará a recuperar la confianza y eliminar ansiedades. La superficie del campo de golf se puede variar y así modificar las pendientes para complicar el juego. No es necesaria la bolsa de palos ni agacharse a recoger la bola, pero necesitar más de un golpe, no estará bien visto. (Vídeo)
Jardín Zen
A veces menos es más. Esta filosofía está muy presente en los jardines zen de origen japonés. Esta pequeña parcela de meditación ofrece un respiro en el día a día además de mejorar la concentración. Un rastrillo de grava y unas cuantas piedras de agua para un ejercicio relajante. Los límites los pone tu imaginación.
