Básicamente hay dos métodos para reparar un pinchazo mediante kits de usuario. Los kit de mechas y los productos químicos auto-sellantes. Veamos qué nos pueden ofrecer cada uno para tomar nuestra decisión si es que estamos pensando en adquirir uno de estos kit para nuestros vehículos.
Los kit para reparar pinchazos con mechas son los más habituales y tienen eficacia probada. Los más simples están compuestos por una lija con empuñadura, un porta-mechas, las propias mechas, un tubo de adhesivo y un cortador. Si te quieres hacer con uno de ellos, es mejor que conozcas cómo utilizarlos. Hay vídeos en internet realmente pedagógicos.
Por otro lado y como habéis podido suponer, es necesario hinchar la rueda para poder circular. Hay kits de mechas que llevan un compresor eléctrico incorporado, para conectarlo a la toma de corriente del vehículo y así poder inflar el neumático. Otros tienen pequeñas botellas de gas presurizado, para introducirlo en el neumático.
La otra opción que os hemos comentado, son los kits con productos químicos auto-sellantes. Suelen estar compuestos de una solución de polímeros inertes, Kevlar y agua, además de no contener amoniaco ni disolventes para no dañar las fibras de la cubierta.
Se pueden utilizar tras el pinchazo o de forma preventiva, introduciendo el producto dentro del neumático. En ambos casos el proceso es el mismo. La diferencia de presión de aire entre el interior y el exterior del neumático impulsa el producto en suspensión a la zona del pinchazo, taponando la fuga de aire, en teoría, de forma hermética y permanente. La reparación es instantánea. Aquí un vídeo de una marca comercial donde se explica cómo utilizarlos.
Estos kits con sellantes químicos suelen generar problemas en la conducción ya que el peso añadido dentro del neumático desequilibra la rueda. Lo recomendable después de utilizarlo es reparar el neumático de forma convencional en un taller especializado.
